Al amigo puntual lo que más le
molesta de su amigo impuntual es que, cada vez que quedan, llegue tarde entre
20 y 30 minutos. Sin embargo, al amigo impuntual lo que más le molesta de su
amigo puntual es que no haya sabido aprovechar el tiempo de espera. Mientras
llega tarde, otra vez, echa cuentas y calcula que, en los más de diez años de
amistad conjunta, el amigo puntual podría haberse leído varios libros (siempre
dice que no tiene tiempo para leer), podría haber acabado la carrera (siempre
dice que no tiene tiempo para estudiar), podría haber aprendido a tocar el
clarinete (siempre dice que no tiene tiempo para practicar), podría… Por eso,
cuando llega a la cita y ve que el amigo puntual se golpea, como siempre,
varias veces el reloj de la muñeca para recriminarle su tardanza, le da un puñetazo
en la cara. Por mentiroso.
Autor: Manuel Rebollar Barro©
País: España
Blog: http://cazadoresdeintervalos.
10 comentarios:
JAJAJAJAJAJAJA, qué bueno, Manuel. Jaja, hombre, menudo mentiroso. Por los menos que no mienta, vale que él llega tarde, pero que no mienta, hombre, que no mienta. Jajaj...
Un abrazo.
Qué bueno, je,je,je..
Yo soy puntual siempre, si no llamo ¿para qué están los móviles.?
Tiene gracia y ritmo tu micro vendavalero...
Besicos
Qué bueno, je,je,je..
Yo soy puntual siempre, si no llamo ¿para qué están los móviles.?
Tiene gracia y ritmo tu micro vendavalero...
Besicos
Me ha gustado mucho, los paréntesis, el análisis, la conclusión. Impuntual pero coherente... me pregunto cuál eres tú de los dos.
Un abrazo
Nunca lo había visto de ese lado pero... que le zurzan al tardón, no me convence y la próxima vez veremos si no le doy un puñetazo yo: en vez de pensar que puede hacer el amigo puntual con su tiempo, que él use el suyo o que le zurzan.
Se nota que soy de las que espera????
Un beso
Jajajjajja me ha encantado y sorprendido el final. ¿Seguirán siendo amigos?
Besos desde el aire
Manuel, sorprendente es tu micro sí, jajaja me parece que el tardón lo que tiene es la cara muy dura. No si encima el otro tendrá que darle las gracias por hacerle perder el tiempo. Es que como es, no saber aprovecharlo, jajaa
Muy bueno, saludos desde mi mar,
Convencida ya de que el tardón mantenía la costumbre de retrasarse por pura amistad. Me encanta como le has dado la vuelta. Un abrazo
Nunca le pegué a nadie, solo me limite a escuchar sus quejas.
Pues acabarán los dos amigos a puñetazo limpio, ¿no?, porque no creo que el otro se quede sin respuesta.El impuntual le está robando el tiempo al puntual.
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